Del libro CON OJOS Y ALAS
Sueño
Cada noche fabrico, como puedo, un ala azul y le preparo un
viaje al lugar que más desee. Le exijo a su regreso: alegrías de otras tierras,
brisa del río y un canto para mi otra mitad sin alas.
Error
Insistió la mosca buscándole la boca, las fosas de la nariz.
Un manotazo violento la obligó a alejarse. La mosca había equivocado el
domicilio: era al lado, donde las flores y el gentío.
Insubordinación
Acepto la costumbre de contar ovejas para atraer el sueño,
pero a menudo sigo a una que se escapa. Continúo distraído lejos del rebaño, y
como ellas, saboreando campos. Es verdad, no escucho la voz de mi jefe que
enloquecido grita reclamando los datos del archivo.
Rosaura
Muchas veces soñó que por ella un hombre se sintiera
condenado. Lo encontró con cadenas en la torre y le liberó el sueño. Esa tarde
ella también soltó sus pájaros.
Insatisfecho
Sancho panza nunca confesó que en las noches lo visitaba un
caballero de triste figura para conducirlo a mejorar el mundo. Tanto se reiteró
el sueño que, casi sin proponérselo, salió el gordo al camino donde ambos se
encontraron. Desde entonces el soñante cambió toda su onírica compañía porque
apenas entornaba los ojos se reiteraban las escenas de campo arado y una
granja. Era el tiempo en que Quijote le prometía el gobierno de la ínsula.
Del libro: CON ABRAZOS
CIRCUNSTANCIA
El hombre se soñó soñado y quiso la circunstancia que en
sueños se encontraran. Al instante se reconocieron ambos, se señalaron con el
índice en un mismo gesto inquisitivo. Sorpresa y fastidio. Resueltamente abrió
los ojos y uno quedó esperando otra existencia cuando sea soñado.
APURO
Verdaderamente lo había olvidado y era imposible recuperarlo
con ayuda del teléfono, mail o mensajero. Seguramente estaría muy frío, sin
forma, descorporizado. Cosas del apuro, dejar, entre corazones de aceituna, un
beso, junto al diario.
PRESENCIA
Primero fueron hormigas las que invadieron mi casa, luego unos
insectos con alas. Ahora, que me he
aprovisionado de feroces insecticidas, un ser de ropaje blanco se acerca entre
las enredaderas y avanza, sin tocar, por una hilera de plantas.
EL CÍRCULO SE VA A CERRAR
Abren el vientre del charco los vehículos que pasan por la
esquina. Sin proponérselo, cada uno se lleva: consuelo de perros vagabundos,
noche resguardada, estrellas, rocío.
DESCUBRIMIENTO
Cuando a Colón se le ocurrió la demostración a través del
huevo, no solo pensó en su tesis. Concluyó también que contenía yema, clara,
nubes, alas, sol.
Ana María Mopty de Kiorcheff (Tucumán, 1948) es Profesora de Letras, egresada de la Universidad de Tucumán, docente en escuelas de nivel medio e investigadora del ILE en la UNT. Ensayista y escritora, ha participado en diferentes antologías de microficción y es una de las investigadoras más importantes del género en el noroeste Argentino (NOA). Ha editado Entre sur y norte (1993), Microrrelatos (1998), Con ojos y alas (2001) y Con abrazos (2007). En su carácter de investigadora sobre el género ha coordinado numerosas antologías entre las que podemos destacar Panorama del Microrrelato en el Noroeste argentino (2004), Micro Quijotes (Thule Ediciones, Barcelona, 2005), El microrrelato en Tucumán y el Noroeste argentino (2010) y Fervor de Tucumán (2010). es una de las fundadoras de la Asociación Literaria David Lagmanovich.
las foto de la autora fue tomada desde la página Internacional Microcuentista que se lee en el siguiente enlace. http://revistamicrorrelatos.blogspot.com.ar
No hay comentarios:
Publicar un comentario