miércoles, 12 de agosto de 2009

VICENTE ODDO



El día 6 de agosto se cumplió el primer aniversario del fallecimiento de Vicente Oddo.
Médico, poeta, narrador e historiador, nació en Añatuya en el año 1932, fue autor de numerosas investigaciones las que se publicaron en los Cuadernos de Cultura, editados por la Municipalidad de la Capital, y en números extraordinarios de El Liberal, entre ellos “Los médicos y la medicina en Santiago del Estero desde la fundación” (1968) y “Panorama de la ciencia en Santiago del Estero desde mediados del S. XVI hasta comienzos del S. XX” (1973) “La epidemia del cólera” (1978) y “100 años de medicina” en el número del Centenario de 1998. Publicó los libros de cuentos “Añatuya” de 1993 e “Insignificancias” de 1995. Recibió innumerables distinciones y fue nombrado Académico Correspondiente de la Academia Nacional de Medicina, de 1a Academia de Ciencias Médicas de Córdoba, de la Sociedad Argentina de Antropología, de la Sociedad Argentina de Humanismo Médico y académico correspondiente de la Academia Argentina de la Historia entre otras corporaciones de relevancia. Como un sencillo homenaje a su memoria el blog En los esteros, dedicado en exclusivo al Microrrelato en el NOA, publica hoy textos de su autoría.
Para esta página se han seleccionado textos de su libro “Insignificancias”

DE CÓMO, ANTES DE POR QUÉ

Redactó su primer libro acerca de cómo redactar un libro.
Ahora ha decidido no escribir el segundo y último que tenía ideado sobre por qué –y para qué – escribir un libro


ANIQUILACIÓN POR NADA MÁS QUE MEMORIA

Se olvidó de olvidar.
A poco murió víctima de una incurable e insoportable intoxicación de memoraciones, de retentivas, de remembranzas, de evocaciones, de reminiscencias, de constantes e inmodificables recuerdos atiborrantes.


AUTOANTÍPODA EN LA VOLICIÓN

Sus últimos años los consumió ora optimista del futuro de cualquier pesimismo, ora pesimista del porvenir de todo optimismo.

RELATIVIDAD ESTADÍSTICA

Cuando se enteró, merced a una noticia periodística, que la expectativa de vida de los hombres en su país , por entonces, era de 72 años y dado que él ya tenía 71 de edad, se puso a cavar su propia tumba.
Lleva ya nueve años esmerándose en ese menester, tan riesgosamente fatigoso para una persona cada vez más anciana.


ADVERTENCIA INFLEXIBLE

Se lo previno claramente:
- Jamás consientas resignado el hecho de que debes morir algún día; pero llegado el momento nunca digas no cuando se te interrogue, a partir de ahora mismo y sin excepción alguna, si estás preparado para ello, pues tal negativa determinaría tu fulminante fin en el acto. ¿O preferirías en este preciso instante morir así?
- ¡No!

2 comentarios:

  1. Estos microrrelatos son sensacionales. Repaso su lectura. Los leí por primera vez, en un valioso libro de Antologias, que me obsequiara un gran amigo. Y gran escritor.

    Saludos cordiales.

    ResponderEliminar
  2. Gracias Marìa Fabiana. Muy amable de su parte

    ResponderEliminar